19 noviembre, 2021

Tokyo Revengers

Sinopsis

Takemichi Hanagaki es un desempleado de 26 años que se entera de que la chica llamada Tachibana Hinata, más conocida como Hina, con la que salía en la escuela secundaria ha muerto. Pero sucede un accidente y regresa en el tiempo a sus años de secundaria donde era un delincuente. Viendo viva a Hina en este pasado, él jura que cambiará el futuro y logrará salvar a la chica que era su novia y a todos sus amigos.

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Opinión personal

Si les suena familiar la premisa, es que seguro ya la vieron en Erased (Boku Dake Ga Inai Machi), un anime del 2016 en el que el protagonista viaja al pasado de forma inexplicable para salvar a una compañera de clase de un terrible destino. La única diferencia es que Tokyo Revengers tiene de protagonistas a unos pandilleros pubertos en vez de prepubertos corrientes. La otra diferencia es que Erased es una historia bien compacta (el manga terminó con 9 volúmenes) mientras que Tokyo Revengers sigue aún en publicación y lleva 24 volúmenes hasta la fecha. Es por esto que el estilo y ritmo de narración son bastante distintos, sumado a que la demográfica de Erased era seinen y la de Tokyo es shounen. 

Lo que le falta de originalidad lo compensa con los personajes y los giros. Los personajes de Tokyo Revengers son un caso curioso, porque en su mayoría me parecieron estereotipos de personajes shounen pero a la vez todos tienen su toque personal que los distingue y los hace sentir más redondos. Especialmente me gustó mucho el protagonista, Takemichi. Ese sí que no es tu típico prota shounen que mete power-ups después de recordar buenos momentos con sus amigos y con eso gana todas las peleas. A Takemichi le salen las cosas mal. Llora todo el tiempo. Lo cagan a palos siempre. Pero desde el principio admite su debilidad física, sabe que va a perder pero igual se mete en el quilombo porque es lo que tiene que hacer, y tiene tanta determinación que no puede evitar inspirar a sus compañeros a seguir. Lo quiero mucho a este llorón. Me pareció un protagonista muy interesante y con mucho lugar para desarrollo. Y otro personaje que me cautivó fue Draken, que debe ser el pandillero con más brújula moral en todo este anime. Sabés que es un criminal que va por la vida entrando y saliendo de peleas, pero igualmente te parece un tipazo y es imposible no encariñarse.


Por otra parte, LOS GIROS. Mamita querida. Al final de cada arco, Takemichi vuelve al presente, en general contento de que pudo cambiar un evento desencadenante de desgracias y seguro de que en el presente todo va a estar arreglado. Para sorpresa de nadie, no había arreglado un carajo. Y como ya nos ha enseñado la gran película Volver Al Futuro, cambiar el pasado puede resultar en futuros impensados. Al principio los cambios en el presente son digamos mínimos y hay tal vez un minuto de paz en el que pensamos que todo va a estar bien. Pero no. Siempre alguien muere o tiene alguna realidad deprimente. Y la verdad te pegan fuerte, porque pasaste todo el arco con estos personajes cuando todavía no les había pasado nada, así que el cambio al presente oscuro es un dolor enorme. Y en su mayoría también es una sorpresa, porque son cambios inesperados. De hecho, el giro del último episodio me sorprendió tanto y me dejó tan manija que le subí un punto de calificación. Lo venía sosteniendo en un 8 cómodo, pero lo tuve que subir a 9 porque disfruté mucho esa última sorpresa. El juego de volver al presente después de cada arco para cambiar cosas y tirar alguna sorpresa para desconcertar al espectador está muy bien hecho. O por lo menos a mí me funcionó y me fue incrementando el interés a medida que pasaban los episodios.

 La animación fue bastante mediocre lamentablemente, muchas imágenes estáticas, pero tuvo sus momentos. Las voces estuvieron GE-NIA-LES, muy bien elegidos todos los seiyuu. El opening es uno de los mejores del año, y la música de Hiroaki Tsutsumi desborda actitud y rebeldía y le da el toque a los momentazos. Escuchen este temazo.


En fin, tendré que ponerme a leer el manga porque el último episodio me dejó LOCA y no creo poder esperar un año o tal vez más para saber cómo sigue la cosa. La calidad de los shounen que estamos teniendo en este tiempo es algo hermoso realmente. Súbanse a la moto de Tokyo Revengers porque no hay forma de que se aburran. Lo que sí, fíjense en buscar los episodios sin censura, porque los que subieron las páginas comunes eran los que subió Crunchyroll, que censuró las svástikas de los uniformes de la pandilla (que en Japón no tienen el mismo significado que para nosotros), pero en vez de borrarlas de la imagen como cualquier persona lógica haría, CORTARON escenas y les sacaron pedazos solamente para sacar los planos en los que se veía el símbolo. El resultado fue un achuramiento horroroso que cambiaba completamente el ambiente de las escenas. Así que ya saben, busquen que lo que van a mirar diga sin censura, pero vayan y miren este anime, no se queden afuera.

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